Muchas veces sucede que las personas se mantienen alejadas más por orgullo que por cualquier otra cosa. Podría suceder que nuestro ego resulte una barrera al intentar buscar la reconciliación con la otra persona; debemos ser capaces de reconocer esta circunstancia y controlarla.

Si somos capaces de poner a un lado nuestro orgullo por unos momentos y logramos acercanos de una forma más empática a la otra persona, tal vez podamos llegar a una compresión mucho más profunda de las causa que la llevaron a tomar ciertas actitudes, y será más fácil reconciliarnos.

5. Expresa tu deseo abiertamente

Es importante que se lo hagas saber de una manera transparente y abierta. Evita los rodeos incensarios y tediosos, que únicamente logran hacer más incómodo el ambiente.

Cuando consigas la oportunidad de tener una conversación con la otra persona, debes mostrar tranquilidad, y después de saludar, dejar muy claro cuáles son tus intenciones. Con eso conseguirás que la otra persona también esté en la misma sintonía que tú.

6. Evita que la emocionalidad juegue en contra

En el momento de tener la charla con la otra persona podrían llegar a tu mente pensamientos de ira o de rencores pasados. Es necesario que seamos capaces de controlar esta situación para que no afecten en nuestro proceso de reconciliación.

Una vez que estemos hablando con la otra persona, ya no habrá vuelta atrás, y no vale la pena que compliquemos la situación a causa de sentimientos del pasado. Intenta centrarte en el aquí y en el ahora, deja el pasado atrás.

7. Practica la escucha activa

Saber escuchar es indispensable para saber cómo reconciliarse con alguien. No vale únicamente con expresarle nuestro punto de vista y nuestro sentir si no somos capaces de escuchar activamente lo que el otro tiene para decirnos al respecto.

Evita ser únicamente tú quien hable en ese momento, asegúrate de que el otro también tenga oportunidad de expresar sus pensamientos y no le interrumpas mientras se encuentra relatando su sentir. Debemos ser capaces de escuchar asertivamente las palabras del otro para que no se generen nuevos malentendidos.